jueves, 31 de diciembre de 2015

EL FINAL DE 2015

Las Notas del Quim
Por Quim Sarriá

     Tiempo increíble para esta época de finales de año. La climatología está en situación de estudios psiquiátricos porque no es normal el efecto que está haciendo, al menos en la zona de Catalunya donde paso mis vacaciones navideñas, con temperaturas benignas y con el Sol danzando, sin nubes interpuestas, desde que se levanta hasta que se acuesta.
     Faltan horas para que el año eche la persiana definitiva y dé paso a otro que, espero, traiga mejores cosas que las que nos ha dejado el viejo.
     En política más de lo mismo: cachondeo puro y duro contra los ciudadanos.
    No paran, desde que se conocen datos corruptos –bueno, desde que se inició la democracia- de salir ante el público diciendo unas cosas y al día siguiente, ¿qué digo? al momento siguiente decir otra bien distinta.
   Comentemos ahora sobre las últimas decisiones del Gobierno provisional, llamado en funciones, de Mariano Rajoy Brey.
   Pretende seguir tomándonos el pelo con las nuevas manifestaciones económicas y queriendo hacernos creer que saldremos muy beneficiados con las rebajas del IRPF (míseras rebajas) y el aumento del salario y de las pensiones (míseros aumentos), que con el IPC a cero nos ahorraremos un pastón.
     Mira, Mariano Rajoy Brey, para que nosotros estemos contentos con esas decisiones económicas debería hacer lo que la lógica y la realidad imprimen en las mismas: el precio del petróleo está casi por los suelos y sin embargo las rebajas de la gasolina y del gasóleo no se corresponden. Son rebajas ínfimas que en algunas gasolineras siguen siendo a precios demasiado altos y no se corresponden con el porcentaje exacto.
     Sin embargo, cuando el precio del petróleo sube, ustedes aumentan el precio de la gasolina y del gasóleo en un porcentaje con el que recuperan los precios rebajados anteriormente y encima obtienen demasiado porcentaje de beneficios.
     
Tanto los precios de la luz, como del gas son jugadas muy, pero que muy tramposas. Engañan al pueblo manifestando que se hacen muchas inversiones en mejoras de las empresas de electricidad y del gas, pero sin embargo esas inversiones las recargan en las facturas a los clientes lo que resume al fin y al cabo que siempre obtienen beneficios sin gastos ningunos.
    Buena trampa para cumplir con las leyes (que además están hechas para beneficio de las empresas) y con todo esto quiero decir que sólo estáis para llenar los bolsillos particulares y nada más.
   Cerramos el 2015 con la misma crisis que se cerró el 2012. Nada ha cambiado desde entonces, salvo los enormes beneficios que han obtenido gente del PP y empresas allegadas, en detrimento de la mayoría de ciudadanos que han visto como recortaban sus derechos, como les robaban sus ahorros y cómo les esquilmaban a impuestos.
    Está muy claro que la jugada pepera de publicar la lista de defraudadores de Hacienda es un farol enorme. Todo el mundo sabe que los defraudadores saldrán de rositas ya sea porque han prescritos sus delitos o porque encuentran amigos en todas partes que alargan los asuntos hasta que llegan el tope de prescripción.
    Lo malo de este país es que aún hay gente crédula, de mente cerrada o cuadrada y que creen más a los embaucadores que a los que de verdad luchan por la verdadera democracia y por la igualdad en derechos sociales y que desean verdaderamente una Justicia igual para todos y que realmente Hacienda seamos todos.

    En fin la vida sigue y yo también, con el deseo hipócrita de desearos a todos un Feliz y Venturoso Año Nuevo 2016, cosa que repetimos hasta la saciedad.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

DE NUEVO, CAÍN

Las Notas del Quim
Por Quim Sarriá

Buen día, gente.
Estamos en los estertores del 2015, un año extraordinariamente raro en algunos aspectos, no tanto en otros y sin estar dentro de la normalidad en muchos.
Llevo algunos días fuera de mi residencia, viajando por la tierra que me acogió hace ya la friolera de cincuenta y pico de años y donde me hice ‘profeta’ sin haberlo sido. Ignoro si me entienden.
Tras las elecciones del pasado 20D, el panorama político del país se va pareciendo cada vez más a un cuadro pintado por Tàpies o a la ya demasiado cocinada escena de un hombre portando una quijada de asno y dirigiéndose a otro hombre con afán de asestarle una fuerte zasca.
Los 119 diputados del PP están sudando la gota gorda, y no por la anómala actitud de la meteorología, en espera de ver de nuevo a su gallego en la poltrona de la Moncloa.
¿He escrito 119 y no 123?, es claro que los cuatro diputados faltantes no son peperos y no formarán parte del grupo parlamentario. Irán al mixto.
Esto me hace creer que habrá nuevas elecciones porque el cariz que está tomando el asunto de los socialistas así lo hace ver.
Es increíble que a estas alturas de la política estén enzarzados, los socialistas, en una batalla interna con más trazas cainitas que de verdadera democracia.
Abiertamente los llamados barones socialistas van a por Pedro Sánchez, y eso que advertí antes de las elecciones que Sánchez era un personaje no apto para liderar un partido histórico por mucho que se le pintara como auténtico socialista.
Pero estos barones están metiendo más cizaña aún, embadurnando la quijada del asno con curare.
Si Pedro Sánchez fue elegido en primarias como secretario general del PSCE -no me equivoco, la C con la que he sustituido a la O significa en el conjunto de siglas: Partido Socialista Capitalista Español porque es en lo que  se ha convertido actualmente y no es Obrero para nada- todos los demás miembros del Comité Federal deben aceptarlo hasta que se resuelva el tema de la gobernabilidad del país.
Si se celebran nuevas elecciones, ya habrá tiempo de cambiarlo pero no antes porque están dando, los socialistas, un espectáculo tan negativo como el que ocurrió durante las elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid.
Que se celebren nuevas elecciones y que Ciudadanos vuelva al redil autonómico, dando de paso oportunidad a Podemos de ampliar el número de diputados, porque el partido de Albert Rivera carece de amplitud de miras políticas y le falta demasiada estructura estatal aunque presenten gente guapa y pija a más no poder. Carecen del necesario poder de seducción con sus propuestas, que son semejantes a las de la antigua y desaparecida CEDA en su tiempo.
Las luchas internas no son aconsejables, menos en estos momentos de incertidumbre política, cuando aún queda por pactar acuerdos, que por otro lado serían bastante raros, con los que dar oportunidad a que alguien presida este Gobierno aunque no se ponga la banda española de la homogeneidad y sí la del arco iris por la diversidad de partidos.
Que decidan lo contrario a lo que han estado manifestando en las campañas electorales nos demostrará la falsedad de nuestros políticos y el engaño que han hecho a sus votantes. Más seriedad es lo que pedimos.

En fin, la vida sigue y yo también, preocupándome cada vez menos la situación política del país.


-

DACA Y TOMA DE RETRACA

Buen día, gente. Primer artículo que escribo en el nuevo año en su comienzo de la segunda década acompañado, como casi siempre, de u...